2/03/2009

Cantinas del oeste

Publicado por Olga Zaneria |


No sé quien coño nos ha vendido la milonga ésta de que la vida va hacia delante. A no ser que se referían al gratificante consuelo de levantarte cada día pensando que ya te queda un día menos para morir. Yo no veo la vida avanzar hacia ningún sitio, habitualmente lo que hacemos es dar vueltas como hámsters en la misma jaula.
Creamos el espejismo de que vamos mejorando, avanzando, escalando peldaños amparándonos en cosas como: “Antes curraba en el “telepi” y ahora estoy de comercial en una inmobiliaria, antes vivía en un piso compartido ahora vivo sola. Antes tenía un cuaderno de rayas, ahora tengo un ordenador portátil.
Pero los cortes profundos, cercanos al hueso, nunca dejan de sangrar, y si lo hacen se abren con facilidad. A veces los tapas con una tiritilla y crees que ya está. “Yo esto ya lo tengo superado” pero no, hasta a Bill Murray le cuesta huir de sus fantasmas, están ahí y son como las puertas de las cantinas del oeste, siempre vuelven y hay que vivir con ellos.

1 comentarios:

Herr Trauriger dijo...

A mi Realmente lo que me Motiva Cada Dia Mas es saber Duchar a la Gente Que me Cae Bien