En la soledad de tu tejado, sorteando goteras, la luna parece inalcanzable y los rasguños de la contienda mucho más profundos.
Todo maullido por desgarrador que resulte parece precipitarse sordo, al vacio.
Tú creías que allí abajo ya no había nadie, a la cantinela de animal herido sólo le pegan tristes tonadillas.
Pero en esa casa siempre te espera tu vaso de leche, tu lata de Wiskas y sobretodo tu gente, la que siempre estuvo ahí… dispuesta a hacerte más agradable la vida.
Aviones en el bosque
Hace 2 años
2 comentarios:
¡Oh, Wiskas! Absolutamente delicioso. ¿Los mojas en la leche o te los comes a palo seco? Yo, la verdad, soy más de sobras. Pero el pienso, de vez en cuando, tampoco está mal.
Ja d Puta ,Si lo que Vos Pretende es que le Ponga Ascensor pa Subir a la Parte de Arriba pues se Pone Y Punto
Ja d Puta Como las Clava Vos.
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