1/29/2010

Una de piratas

Publicado por Olga Zaneria |



Surgió, como surgen todas las adaptaciones libres, de manera inesperada…Los elementos eran los mismos, en teoría los dos nos basamos en el mismo libro sin embargo acabamos contando muy distinta película.

La mía no fue un taquillazo, sino más bien un gatillazo y eso que no había tiros, nunca me doy por la farlopa. Sólo aspiraba a una humilde historia de piratas y me alegro muchísimo de haberla realizado. Hubo una botella de ron, patas de palo… tempestades e incluso alguna calavera.

Y una hermosa chica de puerto a la cortarle chascarrillos y retruécanos de marinero viejo, con la surcar los mares, al menos por un ratin y disfrutar juntos de algún pequeño botín.

Pero no lo conseguí, ella resultó ser mucho más. Una vez en mar abierto, su humedad le caló hasta los huesos. El ratin se tornó instante y en su mini travesía por archipiélagos esquilmados ningún tesoro encontraron.

Un día ella, tal y como le venía avisando, se marchó sola nadando.
Y mi bucanero de escorbutos eternos lloraba y se maldecía pesando: “¿Dónde diablos íbamos a ir en éste viejo barco?”

¡Disfruta, sirena!

2 comentarios:

Herr Trauriger dijo...

Viejo Lobo de Mar, a estas Alturas y Sin aber que todas Las Sirenas son de Mentira,tan solo son Verdad cuando se Disfraza la Realidad?

Que Mejor que una Elegante Femina de la Calle,a la que No le De Verguenza Un Roto en la Media y que se Taje para Celebrar que su Gato hoy Tiene Friskis pa comer.

Que sincero que es el Mar,A mi no me Gusta Nada,es mas lo Odio,pero Cuando una Ola Rompe,es por que Vendra Otra

Un Viejo lobo de Mar lo Deberia saber.

Tuvalua dijo...

Pues a mi me gustan l*s piratas: navegando hacia horizontes imprecisos, cambiantes en función de un oleaje ambiguo; arriesgando las pocas certezas posibles en la mar embravecida, explorando los límites de su armadura; disfrutando de las islas paradisíacas salpicadas sabiendo que pueden ser espejismos; atreviéndose con un océano de dudas sin aferrarse a los pronósticos sensatos... Pero hasta l*s piratas necesitan un descanso en tierra firme para reacomodar razón y deseo y repensar nuevos criterios para el próximo viaje.
Compañero pirata, tenemos que seguir buscando esa tierra de nadie que somos nosotr*s mism*s!